Tres años de huida hacia delante, desde su pueblo de Senegal hasta alcanzar Europa. Sometido a las duras condiciones del Sáhara, a los desprecios de Libia y Marruecos, a las mafias que ven en el tráfico clandestino de emigrantes un lucrativo negocio. Hasta saltar la valla de Ceuta en 2005. Con un objetivo principal: ganar dinero para …