Ponente: Sacramento Pinazo Hernandis, Doctora en Psicología, Licenciada en Pedagogía.
Conferencia enmarcada dentro del Seminario “Poder y Ciudadanía en el mundo actual”.
Esquema
1.Personas mayores¿ciudadaníaactiva?¿desempoderadas o empoderadas?
2.Envejecimiento productivo
3.Ciudadanía activa y participación de las personas mayores
4.Discriminación y edadismo en la vida social
Resumen
La ciudadanía supone implicarse en asuntos colectivos, un sentido de pertenencia e interés por la sociedad en la que vivimos, en donde la persona no es un siempre ‘consumidor’ de derechos y usuario de los servicios sino alguien con voluntad de participar en la toma de decisiones colectivas en diferentes niveles. Esta práctica de la ciudadanía se fundamenta en un compromiso con valores democráticos, antidiscriminatorios y de derechos humanos.
En las sociedades envejecidas, en las que hay un aumento progresivo de personas mayores, la aplicación del concepto de ciudadanía activa es particularmente crítico,pues la vejez ha sido (y aún hoy lo es) tradicionalmente asociada a una etapa de pasividad y de dependencia, en la que las personas ni podían ni deseaban participar, y se mantenían fuera de las corrientes sociales de innovación y toma de decisiones. Cambiar esta imagen implica incorporar una visión participativa y de ciudadanía activa como componente esencial de un ‘buen envejecer’. Hablar de ciudadanía activa supone considerar actividades como el voluntariado, el asociacionismo o la participación política, como elementos centrales del envejecimiento activo y saludableque merecen reconocimiento social y apoyo desde las políticas públicas. La Unión Europea define sus políticas de envejecimiento activo como aquellas orientadas a ayudar a las personas que envejecen a estar a cargo de sus propias vidas y contribuir a la economía y la sociedad.
Hablar de ciudadanía activa refuerza la idea del envejecimiento y la vejez como momento productivo de la vida, y de la participación como un componente esencial en el concepto de envejecimiento productivo.
La ciudadanía activaimplica una práctica participativa, y es una actividad productiva, ya que implica un sentido y un bien colectivo, ayuda a construir comunidades más integradas, resilientes y capaces de atender más adecuadamente las necesidades de sus miembros, sociedades más igualitarias, donde a la vez diferentes grupos puedan tener voz y se reconozca la diversidad.
Desde 1900 hasta 1960 la percepción social sobre los adultos mayores pasó de una actitud de benevolencia y protección a una de exclusión en la que las personas mayores debían retirarse y desconectarse de la sociedad voluntariamente debido a su edad. Desde entonces, conceptos como el de envejecimiento exitoso, activo y saludable y productivo se han ido instaurando para una visión más amplia del buen envejecer.
El concepto de envejecimiento productivo cambió una imagen negativa del envejecimiento y los adultos mayores (por ejemplo, deterioro, pérdidas, desconexión, muerte, deterioro de la salud y demencia) a una perspectiva de activos: adultos mayores como miembros esenciales de la sociedad con talentos, experiencia y pasión para transformarse a sí mismos y al mundo que los rodea. El envejecimiento productivo considera el proceso de envejecer como una oportunidad para las personas, para las comunidades y la sociedad.
El envejecimiento productivo es cualquier actividad desarrollada por una persona mayor que produce bienes o servicios, sea remunerada o no, o desarrolla capacidades para producirlos y hace referencia al concepto de productividad en un sentido amplio, entendiéndose como el conjunto de beneficios colectivos que las personas mayores consiguen a partir de sus acciones individuales. Es decir, la productividad apunta al “hacer con sentido”, se orienta a la contribución social de las personas mayores y a la satisfacción de necesidades sociales relevantes.
Pero todavía quedan algunos retos y barreras que superar, como el edadismo.