Las condiciones laborales actuales hacen que la norma española pueda estar discriminando por razón de sexo a las empleadas del hogar, según un estudio de la Fundación Alternativas elaborado por la investigadora Arantxa Zaguirre.Los sueldos de las empleadas domésticas representan, de media, el 44% del salario promedio de la economía, “lo que explica las tasas diferencialmente altas de riesgo de pobreza y exclusión social” del colectivo.Es el único trabajo donde el despido puede ejercerse sin causa, solo por “desestimiento” del empleador, algo que, señala el informe, está prohibido por la Organización Internacional del Trabajo.