Lo que ocurrió en Brasilia el pasado día 8, una semana después de la toma de posesión del presidente Lula da Silva, es un acontecimiento que solo tomó por sorpresa a quienes no quisieron o no pudieron informarse de sus preparativos, ampliamente difundidos en las redes sociales
Mostrar a los hombres que muchas de sus inseguridades, problemas y malestares tienen que ver con el patriarcado y no con el feminismo -como tratan de hacer muchos- puede ser el camino para construir una alternativa más amplia y más fuerte