Ahora está de moda hablar de salud mental, pero siempre es la salud mental de los otros, de las otras. Es complicado hablar de la propia, y más teniendo cierta exposición pública.
Desde su inicio, la cita olímpica ha visto escenas que han generado debate sobre asuntos con implicaciones sociales al margen de la competición deportiva y que van desde la reivindicación de la salud mental de Simon Biles a la denuncia por las dificultades para conciliar maternidad y deporte de la nadadora Ona Carbonell
La tristeza por la basura –corrupción troncal– que nos asedia con total impunidad precisa soluciones y prevención. Cuando cada día se agravan los motivos pisoteando a los ciudadanos y sus derechos, ¿cuál es el capítulo siguiente?